Octava tarea: Caminante no hay camino.

CAMINANTE, NO HAY CAMINO

Hace unas semanas, durante mi periodo de prácticas, estuvimos haciendo una actividad de dictados el día de Sant Jordi. La profesora estuvo recitando varios escritos y poemas mientras las alumnas copiaban lo que escuchaban. Dio la casualidad de que recitó uno de mis poemas preferidos; es de Antonio Machado. El poema dice: 

Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar.

Se trata de un poema sencillo y corto, y es mi preferido ya que refleja la vida misma en muy pocas palabras. Nos inculcan que hay un camino en nuestra vida que debemos seguir. En ese camino nos encontramos piedras, personas que se quedan y otras que se van. Nos dicen que hay que seguir ese camino y no desviarnos de él, para así llegar a una meta: la felicidad.

No obstante, este poema refleja todo lo contrario a ese pensamiento. No existe ningún camino, nosotros, con cada uno de nuestros pasos y acciones, creamos nuestro propio camino. No debemos arrepentirnos del camino que construimos, siempre podemos mejorarlo a pesar de no poder cambiar el recorrido realizado. Pero, lo más importante es no retroceder, ni volver a pisar terrenos pasados; nuestra mente y nuestra vista nos permite echar un vistazo atrás, pero debemos seguir creando y construyendo. 

Este poema me llevó a establecer una estrecha relación con un escrito de Paulo Coelho, del libro que expuse en la entrada anterior, y con el que me sentí muy identificada.

“Todas las personas, al comienzo de su juventud, saben cuál es su Leyenda Personal. En ese momento de la vida se ve todo claro, todo es posible. La gente no tiene miedo de soñar y desear todo aquello que le gustaría hacer en sus vidas. No obstante, a medida que el tiempo va pasando, una misteriosa fuerza tarta de convencerlas de que es imposible realizar la Leyenda Personal”.

Este escrito lo que quiere decir es que todos siempre establecemos en nuestra mente como va a ser nuestro futuro y cómo y qué vamos a llegar a lograr y a ser. No obstante, a medida que vamos creciendo, nos damos cuenta de que nada sale como teníamos planeado ni establecido; nos sorprendemos descubriendo habilidades y gustos que teníamos ocultos; nos decepcionamos con aquello que creíamos que lograríamos y nos damos cuenta de que le dimos más importancia de lo que debíamos darle. 

 

Construimos nuestra vida en nuestro día a día, paso a paso. Y, eso es lo más bonito de todo, que no tenemos que seguir ningún camino; tenemos el privilegio de crear y elegir el camino que queremos seguir.